
I. Sobre
el concepto, su importancia y modos de entenderlo del ocio
¿Has reflexionado alguna vez sobre lo que es
el ocio, las horas que le dedicas o la importancia que tiene en la sociedad
actual? Este trabajo centrado en el estudio
de la pedagogía, tratara de mostrar unos conocimientos fundamentales sobre el
ocio, su relación con nuestras vidas y
su incidencia comunitaria.
A.
Aproximación
al término ocio
La palabra ocio procedente del otiumlatino,
según J. Coerominas, se introduce en el castellano en el siglo XV, en el
renacimiento hasta hace pocos año ha sido contaminado negativamente por el
vicio de la ociosidad, sinónimo de vagancia y de no querer trabajar, según el
diccionario de la Real Academia Española el ocio es la casación del trabajo, es
decir, descanso diversión y en la edición de 1992 añade otro significado que es
“tiempo libre de una persona”.
Sebastián de Grazia que “tiempo libre se refiere a una forma concreta
de calcular una determinada clase de tiempo;mientras el ocio es una forma de
ser”.
Para
Aristóteles el ocio es “el principio de todas las cosas”; ya que, con él
se logra el fin supremo del hombre que es la felicidad. J. Pieper, el filosofo
redescubrió esta manera de entender al ocio para el pensamiento del siglo
XX , al decir que “el ocio es un estado del alma” y “ intima falta de
ocupación” de ahí que se pueda decir que el ocio esta directamente relacionado
con la percepción receptiva y contemplativa del ser.
Loas pilares a partir de los cuales, se ha construido
la nueva teoría del ocio sean: percepción de libertad, motivación intrínseca y
autotelismo.
El modelo desarrollado por Neulinger con
respecto a la Recreación Terapéutica, presupone
que el ocio es resultado de una libre elección, frente a la elección
obligada del trabajo. El elemento central es la libertad que lleva a cabo la
elección de un acto. A mayor conciencia de sí mismo corresponde
un mayor nivel de elección y de libertad.
§ Ocio
y tiempo
Toda vivencia de ocio transcurre en un tiempo
de gestación y desarrollo “tiempo de ocio” , esto nos remite al tiempo empleado específicamente en prácticas de ocio
, es considerado algo objetivo, medible
y cuantificable; pero el ocio, es nuestra vertiente personal, subjetiva ,
difícil de cuantificar los momentos y los efectos del proceso (experiencia
completa).
La vivencia del ocio
gana significación, importancia y
calidad como preparación de nuestras vacaciones, fiestas, diversiones y
hobbies, pero no completaría su sentido si no incorporase un tiempo posterior
para el recuerdo permitiendo unir el pasado, presente y futuro. Esto posibilita
entender la vivencia del ocio como una experiencia dinámica. L a monotonía,
fuente de rutina y aburrimiento, es la pérdida del dinamismo temporal se da en el presente; es decir,
cuando falta esperanzas en un futuro satisfactorio.
§ Ocio
y ociosidad
La
ociosidad está relacionada con la pereza, causante de todo vicio por oposición al trabajo. Laín
Entralgo dice que para nosotros el
ocio solo cobra sentido cuando es descanso;
de otro modo es pereza. Él al igual que J. Pieper y otros modernos tratadistas
dicen que la vivencia del ocio, en sus diversos modos forma parte de nuestra vida y es necesaria ante cualquier
pretensión de felicidad.
B.
Importancia
y actualidad del ocio
El
ocio de las generaciones pasadas no fue un fenómeno tan significativo como lo
es ahora. Armando de Miguel, en 1998, señala que resulta llamativo el ascenso del ocio al ocupar un primer puesto en su escala de valores, por encima del
trabajo y la familia.
María S. Cabrera afirma que el tiempo libre y ocio ocupan un cuarto lugar en la
jerarquía de prioridades de los españoles actuales.
Antonella delle Fave
y Fausto Massimini, estudiando el significado del ocio en un grupo familiar de tres generaciones, donde
los abuelos tenían una satisfacción por el trabajo (58%) y en el ocio (16%), en
la generación de los padres se
encontraba un cierto equilibrio entre el trabajo (41%) y ocio (44%) y,
finalmente en la generación de los nietos el ocio tiene un (71%), frente a un
(19%) atribuido al trabajo. Esto supondría un aumento del tiempo libre
disponible; las encuestas constatan la
importancia central que se va
concediendo al tiempo libre y al ocio; es decir, a la realización personal
fuera del trabajo.
LA EDUCACIÒN DEL OCIO
I. Ocio y Educación
Para
comprender que la educación del ocio es
un proceso relacionado con el sistema educativo, la familia y las actividades
juveniles; hay que entender primero que la educación del ocio tiene que ver
con el desarrollo de
conocimientos desinteresados y acciones gratificantes, revalorizando lo
cotidiano; que se extiende a lo largo de
toda la vida evolucionando con nosotros mismos, con nuestras necesidades,
capacidades y experiencias. Su objetivo constante es aumentar nuestro potencial
humano para vivir experiencias de ocio de calidad. Se deduce que la educación
del ocio necesita ser objeto de
reflexión en las instituciones educativas, familia y la comunidad, pensando hacia el futuro; ya
que, es un proceso continuo de aprendizaje personal en la que resulta esencial
el desarrollo de actitudes, valores,
conocimientos y habilidades de ocio. La carta de la WLRA (Asociación
Mundial de el Ocio) pide a los gobiernos que tomen conciencia de su
importancia y apuesten por el futuro a través de la educación del ocio,
entendida como desarrollo personal y social, añadiendo la reflexión sobre la
formación laboral de los nuevos profesionales del ocio.
A.
¿Es
necesaria la educación del ocio?
Es
un tema tan importante; ya que, es de especial atención educativa, por su
significado personal y social que crece día a día. Hay mucha gente que piensa
que es algo innato y no se debe tocar, por lo que la intervención educativa debería quedar alejada de cualquier
planteamiento relacionado con el ocio.
Pierre Laine
dice que el ocio tiene que ser personalizante; es decir, que permita el
ejercicio de la libertad y la
realización del propio pensamiento.
De
modo que la educación es algo
necesario para que el ser natural
se vaya convirtiendo en ser
cultural, desarrollándose plenamente
como persona,
actualmente
el disfrute y el ejercicio de ocio no
depende solo de la disponibilidad de tiempo
y de recursos; también y de modo especial, de la percepción y la actitud
que se tiene sobre el mismo.
Así
la persona educada en el juego sabrá
usarlo como motivo de disfrute y no de sufrimiento; es decir, la educación del
ocio es una educación consiente y
sistemática en la que se aspira conseguir mejoras deseables en el ejercicio del
ocio como pueden ser referidas al pensamiento, sentimientos, actitudes,
conocimientos, conductas, destrezas, etc.; a cualquier persona de cualquier
edad.
Una
adecuada educación del ocio facilitara
el desarrollo del ocio solidario y la apertura de nuevos caminos de
respeto e integración.
§ Razones
que justifican la necesidad de la Educación del Ocio
De
modo que múltiples razones que
justifican el desarrollo de la Pedagogía del Ocio

Por
la percepción negativa que
tradicionalmente se ha tenido del ocio a
consecuencias del ocio nocivo por parte de las sociedades acomodadas, por
ejemplo, drogadicción; realidades relacionadas con el ocio consumista.
A
juicio de Csikszentmihalyi, el problema fundamental es que no
tenemos las destrezas incorporadas para utilizar el tiempo libre. La
educación del ocio nos prepara para evitar
la impersonalidad de parte del marketing que lleva consigo perdida de la
libertad. Evita también la frustración y
el estrés, otro sentimiento que abunda
en la sociedad actual que altera nuestro sosiego y resquebraja la salud. La pedagogía del
ocio se ocupa de enseñar a elegir y a
descansar, lo cual produce una vida emociona y estable.
A
menudo se recurre a sustitutos tales como la televisión y entretenimientos electrónicos
que se han convertido en nuevos educadores; los padres tienen solo tiene un mes de vacaciones y los hijo
dos, siendo un problema para un ocio adecuado. Para emplear de una manera
autónoma y racional el tiempo libre para llegar a realizarse bajo el
influjo de la educación de ese tiempo; encontrar un equilibrio razonable, sin conflictos.

Genera una gran
motivación (desarrollo personal y deseo
de vivir) ya sea en niños, adolecentes y adultos.
Afirma A. Sivan que “la
educación del ocio forma parte del proceso de sociabilización de los individuos en su contexto social para
mejorar la vida”.
Douglas A. Kleiper señala
que es ideal para potenciar capacitación, seguridad, identidad, comunicación,
significado y trascendencia; entonces la educación del ocio está orientada a la integración,
participación y la igualdad de
oportunidades. El aumento de personas consientes, la demanda de formación y la
aparición de nuevos profesionales de servicio del ocio nos lleva al buen
desarrollo y calidad de vida.
B.
¿Qué
es la educación del ocio?
Muchos pensaran que se trata
de enseñarnos como debemos o tenemos que divertirnos, lo que resulta absurdo; ya que, tiene como
objetivo preferente preparar al individuo para llevar a cabo acciones de
provecho durante su tiempo libre.
La
educación del ocio no puede quedar en
una mera transmisión de conocimientos,
sino tiene, una relación directa con la libertad, autonomía, autorrealización y
percepción; de allí se entiende que la educación del ocio es una de las
herramientas más valiosas para favorecer el desarrollo integral de la persona y
la adquisición de conductas positivas.
§ Planteamientos
educativos actuales
Supera
el objetivo de preparar a niños y
jóvenes para llevar cabo acciones de provecho
durante su tiempo libre. La educación del ocio se percibe en la
actualidad de un modo distinto, se puede deducir de los tres siguientes modos:



§ La
educación personal del ocio
Es una educación
centrada en la persona, sin perder de vista que el concepto de persona se
entiende aquí desde su vertiente individual y social o comunitaria para llegar
a cabo la educación integral, favoreciendo el objetivo de restablecer su
sentido de seguridad y estabilidad.
§ La
educación comunitaria del ocio
El
objetivo no es cada persona sino una comunidad, pero sin olvidar la importancia
del desarrollo personal del individuo, busca el cambio de actitudes y hábitos
comunitarios en beneficio de una paulatina implantación del derecho al ocio y el aumento ce la
calidad de vida de la comunidad.
§ La
educación de profesionales del ocio
Todo profesional del
ocio debe de conocer los planteamientos generales de la educación personal y comunitaria del ocio. Po otra
parte los educadores y pedagogos, personas que se ocupan de enseñar y transmitir los aprendizajes artísticos, deportivos,
recreativos o específicos del ocio en sus diversas manifestaciones y siempre
desde un prisma didáctico.
Estudio del ocio se aplica a los programas universitarios
(docentes, investigadores, etc.) que
deben de desarrollar y difundir los nuevos conocimientos científicos y
técnicos que están desarrollándose en torno al ocio y su empleo; y dándose como
una actividad libre, que los gratifique y de manera desinteresada.

El
estudios de los currículos de ocio en Europa América reflejan marcos y estructuras de desarrollo diversos,
en función de los países, denotan diferentes puntos de partida y deferentes
concepciones del tema que desarrollan. Desde el punto de vista global podemos
hablar de tres modelos diferenciados; el modelo pedagógico – social, también
denominado tradicional, el modelo recreativo, propio de la experiencia
americana, y un tercer modelo, mas reciente, caracterizado por la concepción
del ocio como producto de consumo, llamado también modelo economicista.
II.
EVOLUCION DE LA PEDAGOGIA DEL OCIO
A.
El
ocio en la historia de la educación
Históricamente el ocio como
su educación ha tenido diversas concepciones en lugares y épocas diferentes.
Lorenzo de Luzuriaga nos recuerda que el ideal de la persona en la Grecia
clásica fue la aretè(excelencia); se
refería a la cultura personal y total, la manera de conseguirlo, con el
desarrollo de la paideia, era la
gimnasia y la música. La primera se refiere tanto a la formación del cuerpo
como el desarrollo del carácter; mientras que la música se ocupa del desarrollo
del espíritu.
Aristóteles defiende en la Políticaque el ocio es “el principio de
todas las cosas” para lograr la felicidad. El ocio se refiere a la actividad
humana no utilitaria, en la que la mente consigue su mas alta y especifica nobleza; no se aprende por
necesidad del trabajo, sino en función de sí mismo, pues el trabajo necesita descanso,
y los juegos son para descansar,
mientras el ocio sirve para lograr el fin supremo del hombre, que es la
felicidad.
En Roma se puede decir que
la educación romana fue más utilitaria y practica, mas sobria y realista se
encuadra en la colectividad del Estado. Dentro del ideal cristiano pronto se
diferenciaran dos tipos de modelos
con planteamientos vitales y prácticos
de ocio muy diferenciado. Por un lado el ideal monástico, en el que la oración
y la contemplación ocupan un lugar muy importante de satisfacción vital. Por
otro lado el ideal caballeresco, cuyo núcleo de valores son el honor, valor y
la galantería como fueron los juglares y trovadores.
El ideal humanista
desarrolla nuevos ideales relacionados con la persona libre, independiente y
responsable. La observación directa de
la naturaleza viene unida al desarrollo de la ciencia e el método experimental
como el arte.
Destaca la importancia de la
educación pública, la necesidad natural y practica, que incluya el cuidado del
cuerpo y la preocupación por métodos agradables y atractivos.
La ilustración,
movimiento que se preocupa del bienestar
y pone énfasis especial en los
aprendizajes útiles, aporta a la educación del ocio la preocupación por lo natural y la necesidad de educación para todos. Frente al romanticismo promoverá el desarrollo del sentimiento y las emociones, donde se
producirá una revalorización del
juego y la espontaneidad. La sociedad
industrial transformo esos ideales en
preparación para la vida útil, por lo que el trabajo desplazo al ideal de
excelencia y felicidad. La skholépasó
a serla escuela que se desarrollo en el siglo XIX y la primera mitad del siglo XX, donde el ejercicio de la
contemplación intelectual de la belleza, la verdad y el bien
sustituye por aprender aquello que demanda la sociedad. No obstante,
la antorcha quedo encendida a través de
los movimientos de renovación pedagógica en la que la educación del ocio
es imprescindible en toda formación humana integral.
La sociedad actual ignora
que el ocio es un importante pilar de desarrollo en el siglo XXI; ya que, está presente en juegos,
prácticas deportivas, viajes, vacaciones, etc. Su ausencia se puede ver en el
aburrimiento, en la falta de
integración, creatividad, iniciativa. El ocio moderno, consecuencia de la era
industrial esta en continuo avance. Al final del siglo XX, la mayor parte de
los ciudadanos en los países más
avanzados podían disfrutar de un ocio
democrático y generalizado; de
manera que la satisfacción no se consigue con tener más o gastar más, sino optando por aquello que nos haga
sentirnos mejor con nosotros mismos y
nuestro entorno. En este nuevo contexto deberemos redefinir hábitos, usos de
tiempo y espacio o la manera de entender trabajo y ocio.